El suero de mantequilla o buttermilk es probablemente uno de esos ingredientes en los que no piensas mucho hasta que preparas una receta que lo requiere. Entonces te encuentras buscando en Internet alternativas o sustitutos porque, seamos francos, lo más probable es que no lo tengas en el refrigerador.
Puede que recuerdes haber estado en los scouts o haber ido de campamento, donde ponías crema en un tarro y lo agitabas hasta que, si tenías suerte, empezaban a separarse pequeños grumos de mantequilla, que se formaban y golpeaban en el tarro.
Ésta, junto con otras formas más “eficientes” de batido, es la forma tradicional de producir mantequilla y, en consecuencia, buttermilk. En sentido básico, el suero de mantequilla es el subproducto líquido que queda cuando los sólidos de la mantequilla se separan y se retiran de la crema espesa.
Puede que mucha gente no sea capaz de describir este perfil de memoria, pero una vez que lo has probado, no lo podrás olvidar.
Es inconfundiblemente lácteo, pero más fuerte. No es exactamente yogur ni ácido, pero tiene un ligero sabor casi a vinagre. Al eliminar la grasa, más ácido láctico pasa a la parte líquida restante, lo que hace que esas notas sean más pronunciadas.
Actualmente, en las civilizaciones occidentales, el “buttermilk” procede del cultivo directo de la leche para conseguir el perfil de sabor deseado.
Este perfil único se utiliza para elevar y darle un sabor característico a todo, desde pan-cakes (o hot-cakes) a productos horneados como galletas y, quizás el más famoso, el aderezo ranch.
Como era de esperar, su popularidad no deja de crecer.
El mercado actual de suero de leche en Estados Unidos en 2024 se estima en 865,390 millones de dólares y se prevé que ascienda a 932,270 millones de dólares en los próximos cinco años.
Si bien esto se debe en parte a sus fantásticos atributos de sabor, sus potenciales beneficios funcionales están llamando la atención de consumidores y desarrolladores por igual.
Como la mayoría de los lácteos, es una excelente fuente de proteínas de alta biodisponibilidad y tiene propiedades beneficiosas para la salud intestinal. Además, es una gran fuente de fósforo y otras vitaminas y minerales esenciales que el organismo necesita.
Desde el punto de vista de la formulación de productos, el buttermilk en polvo tiene varias ventajas sobre otros ingredientes lácteos comunes, principalmente la leche deslactosada en polvo.
Aunque ambos tienen un contenido proteínico casi idéntico y se valoran como opciones bajas en grasa, el buttermilk en polvo tiene un contenido de grasa ligeramente superior, que puede ser suficiente para añadir ese extra de indulgencia y riqueza láctea. También es más soluble que la leche deslactosada en polvo y, con su perfil láctico, puede ayudar a realzar las notas lácteas.
Sin embargo, a pesar de sus evidentes ventajas funcionales y logísticas, también sufre la misma volatilidad que otros productos lácteos.
Según Global Dairy Trade, aunque los precios actuales han bajado más de un 60% desde el punto álgido de la crisis de la cadena de suministro en 2022, han subido más de un 20% en los últimos 12 meses.
Este tipo de incertidumbre y volatilidad puede ser un desafío para los desarrolladores que quieran aprovechar las ventajas y el sabor del buttermilk. Sin embargo, podría acabar siendo un grave problema para los productos en los que es fundamental para su experiencia de sabor.
Los auténticos sabores de buttermilk podrían ser la solución.
Para los desarrolladores centrados en el sabor por encima de los beneficios funcionales, la reducción o incluso la sustitución podría estar sobre la mesa. Nuestros sabores de buutermilk o suero de mantequilla lácteos y libre de lácteos capturan tan bien el sabor suave y cremoso que podría reducir costos sin miedo a sacrificar la calidad o el sabor.
En situaciones en las que la presencia del buttermilk o buttermilk en polvo no es negociable, los sabores de Edlong proporcionan la flexibilidad necesaria para explorar otras formas de optimizar y estabilizar el costo de su formulación, dándole tranquilidad independientemente de la incertidumbre del mercado.
Tal vez el sabor del suero de mantequilla sea la forma perfecta de elevar su producto o ampliar su línea de ofertas, y para ello necesita una solución igualmente deliciosa y rentable.
Sea cual sea su motivo, ¡nosotros podemos ayudarle!
Póngase en contacto hoy mismo con nuestro equipo global de expertos para descubrir cómo nuestros auténticos sabores de buttermilk pueden ayudarle a mantener contentos su presupuesto y las papilas gustativas de sus consumidores.
Acerca de la Autora: Angela Lantman, Manager – NA Applications
¡Conectemos en LinkedIn!
Llevo casi 25 años trabajando en la industria de los sabores como desarrolladora y gestora de productos. Equilibrar el arte y la ciencia para crear alimentos y bebidas de gran sabor ha sido mi pasión como desarrolladora de productos. Tengo la suerte de seguir trabajando con los clientes al tiempo que dirijo un equipo increíble de científicos en alimentos y chefs. Participar en la evolución del mercado de productos vegetales ha sido un reto y una recompensa. Edlong y yo estamos aquí para ayudarte a encontrar una solución deliciosa a su próximo reto.
Topics: Reducción de ComodidadesSabores de MantequillaSabores Lácteos
Resource Type: Artículo
Resource Region: US